Bajo mi punto de vista, creo que este asunto no deja de ser más que un "pasteleo" para "dormir" el tema de la agenda política hasta después de las elecciones el próximo 20 de noviembre. Y todo esto lo han hecho porque no se han atrevido a hacer lo que demandaba Rubalcaba, a través de la fiscalía: enviarlo a Irún.
"Que algunos se aten bien los machos", como ayer adelantaba Eduardo Serrano en el Gato al Agua, porque puede que al juez Ruz, le dé por investigar a fondo. El auto de procesamiento que había presentado "estaba cojo" porque, entre otras cosas, no había llamado a declarar a los dos últimos ministros de interior, Camacho y Rubalcaba, que...digo yo, "algo" tendrán que aportar.
No olvidemos tampoco que alguno de los altos cargos de interior imputados (que siguen imputados–) estaba más que convencido en seguir la senda que tomó en su día Amedo. En su día, esa senda llevó al que fuera ministro de interior, José Barrionuevo, a la cárcel...¿Recordáis?
Pero en realidad, lo realmente triste y preocupante es constatar, otra vez, que los jueces (que no la justicia) moldean sus decisiones a la agenda política, cuando no directamente a los intereses de los políticos. Tras esta afirmación, puedo decir qu mientras un gobierno esté en condiciones de ayudar a los jueces, siempre habrá jueces dispuestos a ayudar al gobierno".
Al final, que nadie se lleve a engaño, el exdirector general de la policía, Víctor García Hidalgo, el inspector de policía, José María Ballesteros, y el jefe superior de la policía del país vasco, Enrique Pamiés, serán procesados y sus superiores las pasarán canutas, pero será después de las elecciones. Lo demás son ganas de manipular. Y si solo lees periódicos como Público o El País, creerás que Rubalcaba es totalmente inocente, pero allá tú.
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